Desconcentración

LLegué a ese momento del año en el que me desconcentro de lo que fue grave en Marzo. Al hecho de haber perdido mis orejeras verdes de peluche, le siguió que el frío entró de manera temprana a mi cerebro multicolor, que a esta altura podríamos guardarlo al lado de Walt Disney. Mi cabeza ya se fue a vivir a la playa. Así que dejen de esperar coherencia, hilos conductores, motricidad avanzada y todas esas cosas que no puedo dar. Sorry man.

Borracha en pijamas

Volví temprano porque realmente ya nohay momento ni lugar para estar sola. Con mi licor de banana con dulce de leche en una mano y mi pijama sexy sadico de bob esponja, me siento plena. Me quedé con mucho en la cabeza de este malibú-weekend.

Tomando como punto de partida los últimos 5 casamientos que fui en el transcurso de un año, he llegado a un par de conclusiones: Siempre soy la prima borracha. No es mi cara de "dispuesta" ni mi historial en la comedia musical la razón por la cual tanto los Mariachis, como Marí-Marí o el susano me llaman para ir a participar. Es mi madre que todavía me cree "cantante, bailarina, actriz y habilidosa con las manos". Soy fanática de Sergio Denis y de Vilma Palma e Vampiros. Mi papá viene a buscarme apenas ponen el popurrí de Palito Ortega. Todavía quedan esperanzas de un príncipe light blue. Me pregunto...Es que ya no quedan en el mundo los hombres divertidos, inteligentes, que sepan bailar, tocar la guitarra y emocionarse hablando de política? Que sean buenos papis y cuiden el medio ambiente? y que..y que...que tengan piernas de fútbol pero resignen un partidazo por acompañarme a ver a Agustín Pereyra Lucena y que encima lo disfruten?

Ya no quedan no no. O si.

Changes

Junto con mi camisón celeste, ya que estás, podrías devolverme 6 años de fidelidad con tus piernas futboleras, 13 puertas cerradas y mi pareo batik que le dió un toque hippie a tus veranos. También los botines de mi hermano, los cds q te apropiaste, mi hebilla de canutillos y las pruebas pornográficas de mi alocada adolescencia. Si querés a cambio te devuelvo los vicios, la gastritis crónica que sembraste en mí y todas todas enteritas todas las que te dejé pasar.

No pierdas el tiempo tirandome sogas viejas, estoy a gusto con mis nuevos problemas.