no tiene nada que ver

Antes tenía flashes de una vida paralela o pasada, en la que era una gitana bien flamenca y caminaba a la verdulería a comprar cosas para cocinar en el patio de una vecindad, de algún pueblo en España. Era sola, tarareaba y tenía amantes toreros. Regaba plantitas en un balcón de primer piso y mi casa tenía olor a madera bien cuidada.
También pensé que por ahí debería haber sido una alegre colombiana que cuida la hostería de alguien a cambio de una habitación.
No sólo no soy nada de eso, si no que ya no tengo mucho tiempo para serlo. De a poco voy trazando el camino urbano de una víctima del sistema que, como hormiga, camina automáticamente a la parada, para ir a su trabajo y hacer lo que le dicta la conciencia, porque si fuese por la inconsciencia ya estaríamos en otro lado. Con los pies enterrados en la arena.
La Coca siempre me dice que yo no soy de las personas que aguanta la rutina por mucho tiempo. No soy fan de esforzarme. Para mi la vida debería fluir un poco más. Alo mejor debería tener un taller de pintura en un cuarto de mi casa. O a lo mejor estoy haciendo el camino largo para llegar al mismo lugar pero mas satisfecha.
Lo que será el orgullo, los modelos, las "obligaciones" que se contagian contaminando a la sociedad y no hay barbijo que pueda salvarnos. Solo la fuerza interior.
Quien es para mi el sistema? El sistema son mis forros compañeros de Facultad, los profesores, los padres de las amigas que no veo hace mucho tiempo. El sistema es el colectivero, la depiladora y hasta mi psicólogo. El sistema se reproduce en cuanto te cuento a ti blog, todo lo que debo hacer en esta vida.



Llegué al punto, no sólo con vos, si no con vos, y con vos y con todo lo que hay, que ya no quiero mas nada. Me caracterizo por los virajes inesperados, y estoy a punto de llegar a la curva. Se nota que estoy en la previa de algo y no puedo esperar más. Necesito velocidad, velocidad. Tiempo debería agregarme para seguir yendo al ritmo deseado pero no morir en el intento. Necesito aire fresco, verde, frío, calor, risas, mucha risa, carcajada. Morirme de risa. Y nada me etá causando mucha gracia. Ni esto ni el otro.

Vete al infierno.